El Valle de Majes esta ubicado en el departamento de Arequipa, se extiende de norte a sur, en una longitud de 80km, entre dos cadenas de cerros altos y escarpados, la capital de la provincia es Aplao. Este fértil Valle cuenta con una gran cantidad de recursos turísticos, además de la belleza típica del lugar, tiene en su recorrido petroglifos, cementerios preíncas (Wari horizonte medio) y pintura rupestre. y las tradiciones que han podido sobrevivir hasta hoy, que forman parte de nuestro Patrimonio Cultural.
Cuando hablamos de patrimonio nos referimos a la herencia de bienes materiales e inmateriales que nuestros padres y antepasados nos han dejado a lo largo de la historia. Se trata de bienes que nos ayudan a forjarnos una identidad como nación y que nos permiten saber quiénes somos y de dónde venimos, logrando así un mejor desarrollo como personas dentro de la sociedad.
Desgraciadamente nuestro Patrimonio se encuentra en peligro, son muchas las causas pero también mucho lo que podemos hacer por remediar estos daños, las amenazas mas frecuentes son el huaqueo, los fenómenos naturales, el vandalismo, la modernidad entre otros, además de nuestra indiferencia.
El Huaqueo
El huaqueo o huaquería es la excavación clandestina en sitios arqueológicos con el propósito de extraer bienes culturales. Se trata de una actividad ilegal y altamente destructiva que la ley castiga. Los huaqueros nos roban trozos que son episodios de nuestro pasado.
Los arqueólogos investigan estos sitios con sumo cuidado, pues solo se pueden excavar por una única vez, y esto debe ser bien hecho, porque después de la primera excavación toda la información que obtenemos del lugar queda alterada para siempre, los huaqueros destruyen toda esta valiosa información, pues solo les importa el valor monetario de las piezas que encuentran y venden; lo que les parece inútil lo botan y destruyen. Debemos tener en cuenta que cuando un objeto está enterrado y es sacado de pronto a la superficie, el medio ambiente empieza a afectarlo de inmediato; primero lo hace en forma invisible pero, con el pasar del tiempo, los daños empiezan a notarse y se van agravando. Por eso los arqueólogos someten cada pieza que sacan a un tratamiento de conservación. Los huaqueros, en cambio, no piensan en el futuro de la pieza; sólo les interesa venderla al mejor postor.
Por increíble que parezca, sin embargo, el beneficio económico que obtienen por las piezas huaqueadas es mínimo; ningún huaquero se hace rico, pues las ganancias son exclusivas de los intermediarios. Esta actividad es practicada con mucha frecuencia en el valle y los daños causados son irreparables, así como todas las piezas son irrecuperables.
Los Fenómenos Naturales
Cuando hablamos de patrimonio nos referimos a la herencia de bienes materiales e inmateriales que nuestros padres y antepasados nos han dejado a lo largo de la historia. Se trata de bienes que nos ayudan a forjarnos una identidad como nación y que nos permiten saber quiénes somos y de dónde venimos, logrando así un mejor desarrollo como personas dentro de la sociedad.
Desgraciadamente nuestro Patrimonio se encuentra en peligro, son muchas las causas pero también mucho lo que podemos hacer por remediar estos daños, las amenazas mas frecuentes son el huaqueo, los fenómenos naturales, el vandalismo, la modernidad entre otros, además de nuestra indiferencia.
El Huaqueo
El huaqueo o huaquería es la excavación clandestina en sitios arqueológicos con el propósito de extraer bienes culturales. Se trata de una actividad ilegal y altamente destructiva que la ley castiga. Los huaqueros nos roban trozos que son episodios de nuestro pasado.
Los arqueólogos investigan estos sitios con sumo cuidado, pues solo se pueden excavar por una única vez, y esto debe ser bien hecho, porque después de la primera excavación toda la información que obtenemos del lugar queda alterada para siempre, los huaqueros destruyen toda esta valiosa información, pues solo les importa el valor monetario de las piezas que encuentran y venden; lo que les parece inútil lo botan y destruyen. Debemos tener en cuenta que cuando un objeto está enterrado y es sacado de pronto a la superficie, el medio ambiente empieza a afectarlo de inmediato; primero lo hace en forma invisible pero, con el pasar del tiempo, los daños empiezan a notarse y se van agravando. Por eso los arqueólogos someten cada pieza que sacan a un tratamiento de conservación. Los huaqueros, en cambio, no piensan en el futuro de la pieza; sólo les interesa venderla al mejor postor.
Por increíble que parezca, sin embargo, el beneficio económico que obtienen por las piezas huaqueadas es mínimo; ningún huaquero se hace rico, pues las ganancias son exclusivas de los intermediarios. Esta actividad es practicada con mucha frecuencia en el valle y los daños causados son irreparables, así como todas las piezas son irrecuperables.
Los Fenómenos Naturales
Los terremotos, inundaciones, huaycos, lluvias torrenciales, así como otros fenómenos naturales son comunes en nuestro territorio. Al igual que las personas y las construcciones modernas, los bienes culturales se hallan en situación de riesgo ante estos desastres naturales Las lluvias torrenciales e inundaciones provocan el colapso inmediato de partes importantes de los edificios de adobe y quincha, y pueden ocasionar el derrumbamiento total cuando los daños no son reparados a tiempo, así mismo el terremoto de hace unos años, afecto seriamente casonas antiguas en el Valle, estas no han tenido ningún tipo de restauración ni siquiera de las fachadas.
La simple exposición a la intemperie causa erosión y deterioro en los sitios, monumentos y bienes culturales no protegidos adecuadamente.
El Vandalismo
Las acciones de vandalismo contra bienes culturales presentan muchas formas y pueden ser intencionales o no, pero los daños que causan pueden llevar a la destrucción del bien.Actos de vandalismo, como pintas, inscripciones o el pegado de carteles, son formas de expresión nefastas que afean edificios, calles y hasta cerros. Pero hechas en un bien del patrimonio cultural, suelen ser particularmente destructivas. Los componentes de las pinturas y pegamentos modernos pueden afectar seriamente los antiguos materiales de construcción de estos inmuebles y las inscripciones o rayaduras pueden dañar las edificaciones para siempre, hasta las piedras se malogran, un claro ejemplo el caso de Toro Muerto que sus petroglifos están rayados con iniciales y nombres de los vándalos.
Cuando son descuidados, los visitantes de museos, sitios y monumentos pueden causar destrozos acumulativos de manera inadvertida. Si un letrero indica "no pisar los jardines" es porque esta acción malogra el césped ¿verdad? Por esta misma razón, cuando los bienes culturales son expuestos al público, debemos respetar los letreros que indican "no tocar", "seguir los senderos" o "prohibido tomar fotografías" y cualquier otra disposición, con objeto de proteger dichos bienes, algo que llama bastante la atención en el museo de Aplao, es que las piezas no están debidamente resguardadas, muchas no cuentan con las seguridad de un candado o hasta de un vidrio, y lo que es peor las momias están apiñadas en cajas de cartón, esto realmente es indignante.
Las acciones de vandalismo contra bienes culturales presentan muchas formas y pueden ser intencionales o no, pero los daños que causan pueden llevar a la destrucción del bien.Actos de vandalismo, como pintas, inscripciones o el pegado de carteles, son formas de expresión nefastas que afean edificios, calles y hasta cerros. Pero hechas en un bien del patrimonio cultural, suelen ser particularmente destructivas. Los componentes de las pinturas y pegamentos modernos pueden afectar seriamente los antiguos materiales de construcción de estos inmuebles y las inscripciones o rayaduras pueden dañar las edificaciones para siempre, hasta las piedras se malogran, un claro ejemplo el caso de Toro Muerto que sus petroglifos están rayados con iniciales y nombres de los vándalos.
Cuando son descuidados, los visitantes de museos, sitios y monumentos pueden causar destrozos acumulativos de manera inadvertida. Si un letrero indica "no pisar los jardines" es porque esta acción malogra el césped ¿verdad? Por esta misma razón, cuando los bienes culturales son expuestos al público, debemos respetar los letreros que indican "no tocar", "seguir los senderos" o "prohibido tomar fotografías" y cualquier otra disposición, con objeto de proteger dichos bienes, algo que llama bastante la atención en el museo de Aplao, es que las piezas no están debidamente resguardadas, muchas no cuentan con las seguridad de un candado o hasta de un vidrio, y lo que es peor las momias están apiñadas en cajas de cartón, esto realmente es indignante.
La Modernidad
La conservación del patrimonio cultural no se contrapone al progreso o al desarrollo tecnológico; por el contrario, los adelantos e innovaciones científicas nos permiten cuidar y administrar nuestros bienes culturales de una manera más eficiente, hay muchas personas, sin embargo, que no comprenden bien la idea de modernidad y piensan que es más importante construir una carretera que conservar un sitio arqueológico; que sería bueno ampliar la iglesia demoliendo una capilla antigua para reemplazarla por un edificio de concreto; o que no ven la finalidad de guardar viejos documentos que ocupan demasiado espacio. Estas y otras conductas parecidas son un error gravísimo que produce daños irreparables, es por ello que es erróneo creer que lo nuevo es mejor, o que lo nuevo y lo antiguo son incompatibles.
Es muy importante entender que el patrimonio cultural no es el amontonamiento de lugares y cosas "viejas", pasadas de moda y que no tienen valor. O, por el contrario, que sólo lo "bonito", de material noble y piedras preciosas tienen valor. Todos y cada uno, aún el más pequeño fragmento de los bienes culturales que componen nuestro patrimonio material e inmaterial son necesarios para comprender el pasado.
La conservación del patrimonio cultural no se contrapone al progreso o al desarrollo tecnológico; por el contrario, los adelantos e innovaciones científicas nos permiten cuidar y administrar nuestros bienes culturales de una manera más eficiente, hay muchas personas, sin embargo, que no comprenden bien la idea de modernidad y piensan que es más importante construir una carretera que conservar un sitio arqueológico; que sería bueno ampliar la iglesia demoliendo una capilla antigua para reemplazarla por un edificio de concreto; o que no ven la finalidad de guardar viejos documentos que ocupan demasiado espacio. Estas y otras conductas parecidas son un error gravísimo que produce daños irreparables, es por ello que es erróneo creer que lo nuevo es mejor, o que lo nuevo y lo antiguo son incompatibles.
Es muy importante entender que el patrimonio cultural no es el amontonamiento de lugares y cosas "viejas", pasadas de moda y que no tienen valor. O, por el contrario, que sólo lo "bonito", de material noble y piedras preciosas tienen valor. Todos y cada uno, aún el más pequeño fragmento de los bienes culturales que componen nuestro patrimonio material e inmaterial son necesarios para comprender el pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario