domingo, 8 de abril de 2007

ALTERNATIVAS DE SOLUCION

Toda autoridad local debe incorporar el principio de protección del patrimonio cultural dentro de sus políticas de planificación del desarrollo.

Los planes de expansión urbana y agrícola y, en general, todo plan de utilización de suelos, deben tener en cuenta la protección de sitios y monumentos tanto arqueológicos como históricos.

Para el tendido de líneas de transmisión eléctrica, redes de agua y desagüe, construcción de carreteras y otras obras de infraestructura en zonas donde se sospecha la presencia de restos arqueológicos, es necesario contar con una evaluación bajo la supervisión del Instituto Nacional de Cultura.

En el caso de que las obras impliquen un posible daño o deterioro de un sitio arqueológico, será necesario tomar las previsiones adecuadas para el cambio del trazado o de la zonificación del trabajo a efectuar. ¿Vale la pena realizar el trabajo? ¿Qué beneficios traerá a la comunidad? ¿Será bueno construir una carretera para atraer turistas? ¿Qué verán estos visitantes si la construcción ha demolido gran parte de los restos arqueológicos?

Ninguna institución, estatal o privada, puede proceder a la modificación de un sitio o monumento integrante del patrimonio cultural sin la autorización y supervisión del INC. Los pobladores pueden y deben denunciar ante la Policía Nacional, la Fiscalía de la Nación, la defensoría del Pueblo y ante el propio INC cualquier intento de destrucción, pues están defendiendo lo que es suyo y les pertenece por derecho propio.

Cualquier permiso que se otorgue a empresas o industrias que utilicen métodos extractivos o que sus actividades puedan implicar daños o perjuicios para la protección del patrimonio cultural de la localidad (por ejemplo, la actividad minera, la ganadería -por cuanto la presencia de rebaños puede destruir los sitios arqueológicos- y otros), debe presentar un plan definiendo las medidas de protección que se tomarán. Toda actividad que haya resultado o resulte perjudicial se paralizará hasta encontrar una alternativa segura, que no afecte los bienes culturales.

Aunque lo dicho anteriormente se refiere sobre todo a los sitios arqueológicos, se aplican los mismos principios a los bienes históricos, tanto muebles como inmuebles.

miércoles, 28 de marzo de 2007

PROBLEMA

Amenazas al Patrimonio Cultural del Valle de Majes.

DETERMINACION

El patrimonio cultural peruano está bajo el amparo del Estado y de la Comunidad Nacional, cuyos miembros están en la obligación de cooperar en su conservación. Dicho patrimonio se divide mayormente en Arqueológico, Histórico-Artístico, Bibliográfico y Documental, siendo los organismos estatales competentes para su preservación y cautela, el Instituto Nacional de Cultura, la Biblioteca Nacional del Perú y el Archivo General de la Nación. Es responsabilidad de estas instituciones el identificar, normar, conservar, cautelar, investigar y difundir el Patrimonio Cultural del Perú en los ámbitos de su competencia.

El Instituto Nacional de Cultura está encargado de proteger y declarar el Patrimonio Cultural Arqueológico y el Patrimonio Cultural Histórico y Artístico, así como también las manifestaciones culturales orales y tradicionales del país. La Biblioteca Nacional y el Archivo General de la Nación están encargados de proteger y declarar el Patrimonio Bibliográfico y Documental, respectivamente.

PLANTEAMIENTO

Este problema esta afectando seriamente el desarrollo de la provincia de Castilla, el Patrimonio Cultural se encuentra amenazado por una serie de factores, pero sin duda el mas peligroso es la mano inescrupulosa del hombre, son los propios habitantes del lugar los que están destruyendo sus recursos que podrían aprovecharlos como atractivos turísticos y con la colaboración de las autoridades correspondientes que brinden un apoyo profesional podrían lograr la creación de un circuito turístico que beneficiaria no solo al valle sino también al departamento de Arequipa y por que no al Perú, con la creación de numerosos puestos de trabajo que les garanticen una mejor calidad de vida.
Sin embargo la falta de conocimientos y de concientización de la población así como el desinterés de las autoridades por proteger y darle el debido mantenimiento al Patrimonio, ocasionara que este siga en declive y que mas tarde sea irrecuperable como la situación en la que se encuentra Toro Muerto, estos petroglifos se han perdido en su mayoría.



Por la destrucción de su historia y los habitantes pierden la posibilidad de que su patrimonio, bien conservado, pueda convertirse en una fuente de ingresos futuros a través del desarrollo del turismo cultural, por ejemplo; mientras tanto, los objetos huaqueados se dispersan en colecciones del Perú y del extranjero.

OBJETIVO

Dar a conocer a la población peruana mediante un blog, el descuido en el que se encuentra el patrimonio cultural del Valle de Majes, así como la inconciencia de sus pobladores por proteger y mantener este legado.

MARCO TEORICO


El Valle de Majes esta ubicado en el departamento de Arequipa, se extiende de norte a sur, en una longitud de 80km, entre dos cadenas de cerros altos y escarpados, la capital de la provincia es Aplao. Este fértil Valle cuenta con una gran cantidad de recursos turísticos, además de la belleza típica del lugar, tiene en su recorrido petroglifos, cementerios preíncas (Wari horizonte medio) y pintura rupestre. y las tradiciones que han podido sobrevivir hasta hoy, que forman parte de nuestro Patrimonio Cultural.

Cuando hablamos de patrimonio nos referimos a la herencia de bienes materiales e inmateriales que nuestros padres y antepasados nos han dejado a lo largo de la historia. Se trata de bienes que nos ayudan a forjarnos una identidad como nación y que nos permiten saber quiénes somos y de dónde venimos, logrando así un mejor desarrollo como personas dentro de la sociedad.

Desgraciadamente nuestro Patrimonio se encuentra en peligro, son muchas las causas pero también mucho lo que podemos hacer por remediar estos daños, las amenazas mas frecuentes son el huaqueo, los fenómenos naturales, el vandalismo, la modernidad entre otros, además de nuestra indiferencia.


El Huaqueo

El huaqueo o huaquería es la excavación clandestina en sitios arqueológicos con el propósito de extraer bienes culturales. Se trata de una actividad ilegal y altamente destructiva que la ley castiga. Los huaqueros nos roban trozos que son episodios de nuestro pasado.

Los arqueólogos investigan estos sitios con sumo cuidado, pues solo se pueden excavar por una única vez, y esto debe ser bien hecho, porque después de la primera excavación toda la información que obtenemos del lugar queda alterada para siempre, los huaqueros destruyen toda esta valiosa información, pues solo les importa el valor monetario de las piezas que encuentran y venden; lo que les parece inútil lo botan y destruyen. Debemos tener en cuenta que cuando un objeto está enterrado y es sacado de pronto a la superficie, el medio ambiente empieza a afectarlo de inmediato; primero lo hace en forma invisible pero, con el pasar del tiempo, los daños empiezan a notarse y se van agravando. Por eso los arqueólogos someten cada pieza que sacan a un tratamiento de conservación. Los huaqueros, en cambio, no piensan en el futuro de la pieza; sólo les interesa venderla al mejor postor.

Por increíble que parezca, sin embargo, el beneficio económico que obtienen por las piezas huaqueadas es mínimo; ningún huaquero se hace rico, pues las ganancias son exclusivas de los intermediarios. Esta actividad es practicada con mucha frecuencia en el valle y los daños causados son irreparables, así como todas las piezas son irrecuperables.


Los Fenómenos Naturales

Los terremotos, inundaciones, huaycos, lluvias torrenciales, así como otros fenómenos naturales son comunes en nuestro territorio. Al igual que las personas y las construcciones modernas, los bienes culturales se hallan en situación de riesgo ante estos desastres naturales Las lluvias torrenciales e inundaciones provocan el colapso inmediato de partes importantes de los edificios de adobe y quincha, y pueden ocasionar el derrumbamiento total cuando los daños no son reparados a tiempo, así mismo el terremoto de hace unos años, afecto seriamente casonas antiguas en el Valle, estas no han tenido ningún tipo de restauración ni siquiera de las fachadas.

La simple exposición a la intemperie causa erosión y deterioro en los sitios, monumentos y bienes culturales no protegidos adecuadamente.




El Vandalismo

Las acciones de vandalismo contra bienes culturales presentan muchas formas y pueden ser intencionales o no, pero los daños que causan pueden llevar a la destrucción del bien.Actos de vandalismo, como pintas, inscripciones o el pegado de carteles, son formas de expresión nefastas que afean edificios, calles y hasta cerros. Pero hechas en un bien del patrimonio cultural, suelen ser particularmente destructivas. Los componentes de las pinturas y pegamentos modernos pueden afectar seriamente los antiguos materiales de construcción de estos inmuebles y las inscripciones o rayaduras pueden dañar las edificaciones para siempre, hasta las piedras se malogran, un claro ejemplo el caso de Toro Muerto que sus petroglifos están rayados con iniciales y nombres de los vándalos.

Cuando son descuidados, los visitantes de museos, sitios y monumentos pueden causar destrozos acumulativos de manera inadvertida. Si un letrero indica "no pisar los jardines" es porque esta acción malogra el césped ¿verdad? Por esta misma razón, cuando los bienes culturales son expuestos al público, debemos respetar los letreros que indican "no tocar", "seguir los senderos" o "prohibido tomar fotografías" y cualquier otra disposición, con objeto de proteger dichos bienes, algo que llama bastante la atención en el museo de Aplao, es que las piezas no están debidamente resguardadas, muchas no cuentan con las seguridad de un candado o hasta de un vidrio, y lo que es peor las momias están apiñadas en cajas de cartón, esto realmente es indignante.



La Modernidad

La conservación del patrimonio cultural no se contrapone al progreso o al desarrollo tecnológico; por el contrario, los adelantos e innovaciones científicas nos permiten cuidar y administrar nuestros bienes culturales de una manera más eficiente, hay muchas personas, sin embargo, que no comprenden bien la idea de modernidad y piensan que es más importante construir una carretera que conservar un sitio arqueológico; que sería bueno ampliar la iglesia demoliendo una capilla antigua para reemplazarla por un edificio de concreto; o que no ven la finalidad de guardar viejos documentos que ocupan demasiado espacio. Estas y otras conductas parecidas son un error gravísimo que produce daños irreparables, es por ello que es erróneo creer que lo nuevo es mejor, o que lo nuevo y lo antiguo son incompatibles.

Es muy importante entender que el patrimonio cultural no es el amontonamiento de lugares y cosas "viejas", pasadas de moda y que no tienen valor. O, por el contrario, que sólo lo "bonito", de material noble y piedras preciosas tienen valor. Todos y cada uno, aún el más pequeño fragmento de los bienes culturales que componen nuestro patrimonio material e inmaterial son necesarios para comprender el pasado.

MARCO LEGAL

Tanto autoridades como instituciones locales, deben tener presente que en nuestro país contamos con la Ley N° 28296, Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación que regula el tema del patrimonio cultural de manera específica.

No olvidemos que hay pena de cárcel (de 3 a 8 años en el caso de bienes arqueológicos y de 2 a 5 años para bienes históricos) y sanciones económicas, tanto para aquellos que sacan ilegalmente del país los bienes culturales, como para los que no los retornan conforme a la autorización concedida.
El huaqueo es una actividad ilegal y altamente destructiva que la ley castiga. La ley señala que los bienes culturales, no descubiertos intergran el Patrimonio Cultural de la Nación, y los que fueran descubiertos en predios de la propiedad privada, son propiedad del estado, pues se busca proteger el pasado comun de todos los peruanos.